Cada mes tenemos a nuestro alcance decenas de películas nuevas de cine que queremos ver. Cada mes salen docenas de libros increíbles que queremos leer. Cada mes salen videojuegos geniales y divertidos que nos gustaría jugar. Cada mes, cientos y cientos de personas en todo el mundo acceden a Internet, disfrutando de muchas ventajas pero también abriendo las puertas a la ciberdelincuencia.
Los servicios en “streaming” o contenido digital a la carta han aumentado su popularidad y muchos usuarios acceden a este tipo de contenido de manera lícita. Sin embargo, cada vez es más popular (y más aún entre jóvenes) el uso de webs piratas y páginas de descarga. Pero el desconocimiento de estas páginas y su transmisión de archivos maliciosos no nos librarán de sus caballos de Troya.
Evita las webs ilegales
Plataformas como Netflix o HBO tienen contenido actualizado, de gran interés entre los jóvenes y permiten la visualización del contenido a cualquier hora del día. Sin embargo, estas plataformas son de pago y cada vez son más las plataformas ilegítimas donde se comparte este contenido. Es así como series tales como “Juego de Tronos” o “Stranger Things”, que se descargan miles de veces al día, son un medio perfecto para ocultar un malware y que infecte nuestros dispositivos.
En 2013, AVG realizó un estudio en el que informaba que “el 90% de los juegos y filmes pirateados contenían algún tipo de archivo malicioso”, aunque a veces nuestra descarga es vigilada con el fin de obtener la dirección IP y así conseguir poder conocer las vulnerabilidades de nuestro sistema.
Algunos consejos
Obviamente, la mejor opción para no ser atacados es evitar dichas webs ilegales, cuyo uso puede llevar a condena. Sin embargo, si una persona decide utilizar sitios de descarga de archivos o portales de “streaming”, es necesario que aprenda a diferenciar un contenido auténtico de uno malicioso. Aquí van algunos consejos:
- Un capítulo con un una calidad media-alta no suele ocupar menos de un par de gigabytes; sin embargo, si el archivo es de baja calidad puede ocupar tan sólo uno o dos Gb, por lo que hay que estar atentos al tamaño de los archivos.
- Un archivo de video NUNCA acabará en .exe o .msi. Es recomendable no descargar archivos comprimidos como los .zip o .rar, pues al descomprimirlos pueden suponer algún tipo de amenaza.
- Hacer uso de los antivirus web actualizado para una mayor protección, restringiendo el acceso a páginas web y haciendo análisis de los archivos descargados con el fin de evitar ataques.
- Hay tener en cuenta que los ciberdelincuentes suelen crear copias maliciosas de los sitios web con direcciones e interfaces similares con el propósito de engañar a sus víctimas, es preferible que no accedas a la primera web que aparece.
- No hacer click en los anuncios o puntos de descarga emergentes, pues nos llevarán a un enlace que generará ataques en nuestro dispositivo.
- Leer siempre los comentarios de archivos que vamos a descargar. Si contiene algún malware, y ha afectado a varios usuarios, lo comentarán para prevenir a los compañeros de fechorías.
La descarga de videojuegos supone una amenaza aún mayor; por lo que, como última recomendación, la supervisión por parte de un adulto de las descargas de internet puede ser tu mayor aliada.
Recuerda: “La conciencia del peligro es la mitad de la seguridad que necesitamos”.-J.Sender