Lo primero que tenemos que entender es que las nuevas tecnologías nos permiten acceder a cualquier información sin limitaciones y no existen barreras físicas que nos protejan. Esto quiere decir que podemos tratar de hablar con cualquier persona y que cualquier persona puede tratar de hablar con nosotros.
¡Espectacular! ¿Verdad?
En realidad sí es espectacular, pero al igual que tú no hablarías con cualquier que te cruzases por la calle, tampoco deberíamos hablar con cualquiera por Internet. Internet nos genera una falsa sensación de seguridad, ya que parece que podemos hacer cosas de forma anónima y sin que se nos identifique, pero cuidado, no es así.
Simplificando las cosas, podemos decir que en Internet tenemos todo a nuestro alcance, y estamos al alcance de todos, buenos y malos, y es de estos últimos de los que tenemos que aprender a protegernos. Ahora bien ¿Cómo lo podemos hacer?
Para ver cómo hacerlo, tenemos primero que diferenciarlos, y para poder diferenciar a los buenos de los malos lo más sencillo es saber qué buscan los malos para poder evitarlos. Habitualmente los malos buscan dinero o información de los adultos que puedan vender y hacerse más ricos, pero esto no suele ser un problema para vosotros, los niños.
Entonces, ¿Por qué es tan peligroso conocer gente por Internet?
Pues la respuesta es sencilla, y todos los padres lo comprendemos, lo más valiosos que poseéis sois vosotros mismos. Si algún malo os contacta, lo que busca es a vosotros y, cómo podéis imaginar, para hacer cualquier tipo de maldad.
Ahora creo que todos tenemos claro que la tecnología es increíble y maravillosa, pero que se puede utilizar para hacer cosas buenas y malas.
Entonces, ¿cómo protegernos?
La respuesta es más sencilla de lo que pensáis y no se basa en la tecnología (aunque nos puede ayudar), lo principal es comprender que no deberíamos hacer por internet nada que no hiciésemos en persona (recordad la falsa sensación de anonimato). Resulta tan sencillo como seguir las recomendaciones que seguro habréis oído mil veces:
- No hablar con desconocidos y no dar nunca información personal. Incluso a través de los chat de los juegos; podemos hablar de cosas de la partida, pero si os preguntan cualquier otra cosa u os piden alguna otra información, mejor cortar la partida y jugar con otra gente.
- Redes sociales, sí, pero con perfiles privados, sin exponer nuestra información a todo el mundo y compartiendo sólo con nuestros amigos.
- Para los “Youtubers“, “blogueros” y similares, es decir, para los que os exponéis públicamente en Internet: Aquí la cosa es más complicada, lo ideal es que los perfiles sean privados y solamente compartir con nuestros amigos y en el caso de que queramos compartir algo de forma pública, hacerlo de tal forma que no se nos pueda identificar (en los videos que no se nos vea la cara y nunca incluir información personal).
- Desconfiar siempre de “super ofertas”, regalos o mails súper urgentes. Nadie regala nada y no hay nada tan urgente que no pueda esperar a comentárselo a vuestros padres.
Para poder aplicar todos estos consejos, lo más importante es que debéis iniciaros en las nuevas tecnología de la mano de vuestros padres y contar con ellos para cualquier duda o problema que os surja a lo largo del tiempo.
Pensad que, si vuestros padres os limitan el acceso, es para protegeros de esos malos que existen por ahí. La conciencia significa que nos importan los pensamientos y estamos siempre alerta. ¡Estemos siempre alerta!
Ahora algo de diversión, aquí tenéis unos juegos donde podéis ver temas de ciberseguridad de forma amena “https://www.is4k.es/de-utilidad/cyberscouts”.