La digitalización del sector salud también ha sido trascendental desde el punto de vista empresarial. Entre otras cosas, ha permitido que las instituciones médicas tengan oportunidad de simplificar una gran variedad de procesos administrativos y de incrementar su eficiencia operativa.
Actualmente, el sector avanza hacia la integración de tecnologías como inteligencia artificial (IA), análisis de datos y el uso de dispositivos conectados a internet. Estos elementos prometen mejorar la capacidad de diagnóstico de los profesionales de la salud, permitiéndoles identificar y tratar enfermedades de una forma más rápida, precisa y eficiente.
A continuación, vamos a repasar las principales tendencias tecnológicas que se anticipan para el sector salud en 2024 y cuál será el impacto tanto en los pacientes como en los profesionales sanitarios.
Auge de la telemedicina
El uso de las TIC para proveer servicios de salud a distancia se convirtió en una necesidad durante la época de emergencia sanitaria del 2020. Según las proyecciones de Statista, se estima que el mercado global de la telemedicina alcance 277.9 mil millones de dólares estadounidenses para el 2025.
La industria de la telemedicina representa una herramienta importante para apoyar el trabajo de los profesionales de la salud y el funcionamiento de las instituciones médicas. Entre otras cosas, ayuda a reducir la congestión en ambulatorios y hospitales, mientras evita desplazamientos innecesarios ubicando al paciente realmente en el centro.
Entonces, 2024 se plantea como el año propicio para la consolidación de la telemedicina, lo que sería posible gracias a la convergencia de factores como la inversión en infraestructuras tecnológicas, consolidación de la cloud, una conectividad de mayor calidad y el desarrollo de plataformas especializadas.
Hospitales Inteligentes impulsados por el IoMT
Conforme crece la adopción del Internet de las Cosas Médicas (IoMT), múltiples dispositivos en el ámbito hospitalario han evolucionado.
Hoy en día es posible para los profesionales de la salud utilizar dispositivos que permitan el seguimiento continuo de parámetros de salud, a distancia y en tiempo real. Esto facilita la gestión de enfermedades crónicas, además de contribuir a la prevención y detección temprana de complicaciones.
La tendencia actual es la transición gradual hacia los “Smart Hospitals”, centros hospitalarios impulsados por el IoMT, donde se aprovecha la tecnología disponible para optimizar y rediseñar los procesos clínicos existentes o crear nuevos. Entre otras ventajas, se podrá mejorar la capacidad de respuesta ante emergencias, permitiendo lograr una atención hospitalaria más proactiva y personalizada que evite la saturación de recursos y una atención de alta calidad a los pacientes en su conjunto.
Realidad Virtual y Realidad Aumentada
El uso de Realidad Virtual (VR) y Realidad Aumentada (RA) en la atención sanitaria se está generalizando. Este tipo de tecnología inmersiva capaz de proporcionar herramientas poderosas no solo mejora la calidad de la atención médica, sino que también es una poderosa herramienta de formación de profesionales de la salud.
Respecto a la atención del paciente, la VR se viene utilizando para recrear actividades que sirven como terapia para el alivio del dolor y la ansiedad. Así mismo se configura como una herramienta clave en la recuperación de diversas patologías. No hay nada que cree más desasosiego que entrar en un quirófano. Gracias a la VR el paciente podrá “ver” el tipo de intervención a la que será sometido y así tener una mejor comprensión del procedimiento.
En el caso de la AR podemos encontrar formación que permita a los profesionales médicos pasar de la teoría a la práctica con un mejor conocimiento y familiaridad con el cuerpo humano. Este permitirá que los médicos noveles o en formación tengan una mayor seguridad, menos estrés a la hora de realizar intervenciones complejas y un mayor porcentaje de éxito en sus intervenciones.
Avatares digitales + IA Generativa + Genómica
Tanto los asistentes virtuales como los chatbots que funcionan a partir de algoritmos de IA Generativa se convierten en potentes herramientas que apoyan la labor de los especialistas.
Al entrenar el modelo de IA con literatura médica, los facultativos pueden obtener consejos sobre tratamientos, diagnósticos y medicamentos, todo lo cual influye al momento de tomar decisiones clínicas.
Cuando se combina la IA Generativa con la creación de avatares digitales para la interacción con pacientes, se obtiene un recurso útil al momento de proporcionar información personalizada al paciente, responder dudas comunes y brindar orientación sobre su tratamiento en situaciones donde la presencia física del médico sea imposible.
La misma Organización Mundial de la Salud (OMS) cuenta con Florence, un avatar interactivo que utiliza la IA para guiar a las personas interesadas en adoptar un estilo de vida más saludable.
Aplicar la IA en el campo de la medicina puede propiciar un tratamiento más específico para los pacientes, llegando a crear casi una medicina personalizada. Si sumamos la información histórica de una enfermedad y la cruzamos con las propias particularidades de cada paciente, podremos establecer procedimientos con una combinación de medicamentos exclusiva para cada uno de ellos, aumentando así el porcentaje de éxito.
En este punto, la genómica, es decir el estudio del genoma de un organismo, nos arrojará mucha luz, permitiéndonos avanzar en estos tratamientos específicos. Consolidar la información disponible para poder llevarla a la práctica será cada vez más frecuente y crucial en los tratamientos de enfermedades graves y complejas.
La necesidad de la ciberseguridad y protección de los datos
La adopción masiva de la telemedicina viene acompañada por la digitalización de las historias clínicas y la integración de información personal proveniente de dispositivos de monitoreo basados en Internet de las Cosas.
Esta combinación de elementos ha suscitado la conciencia de contar con las mejores medidas en torno a la ciberseguridad en el entorno de la atención médica, así como la protección de sus datos. Poca información hay más sensible para una persona que la relativa a su salud. En ese sentido, las instituciones médicas deben considerar invertir en el fortalecimiento de sus protocolos de ciberseguridad, especialmente en asuntos como la protección de datos con cifrado de información y restricción de accesos.
Sin duda, se trata de un tema importante pues el acceso a información médica confidencial y la manipulación de datos, además de representar una violación a la privacidad del paciente, puede tener consecuencias negativas sobre el diagnóstico y tratamiento.
Enfoque en la sostenibilidad
Utilizar tecnología aplicada al sector sanitario permite incrementar la sostenibilidad de la actividad hospitalaria. Se trata de una respuesta estratégica a la necesidad de mayor eficiencia en la gestión de recursos y los desafíos medioambientales como el cambio climático.
Gracias a la telemedicina es posible reducir las emisiones de CO2 y la huella ambiental de los hospitales. Por su parte, la gestión digital de historias clínicas y expedientes digitales ayuda a reducir la dependencia del papel.
La sostenibilidad es una tendencia empresarial importante en 2024, siendo pilar de las iniciativas que buscan mejorar la reputación y demostrar compromiso social.
Como vemos, 2024 presenta grandes oportunidades de cara a que la atención médica que reciben los ciudadanos de todo el mundo siga mejorando a lo largo de este año. El acelerado proceso de transformación digital que vive el sector también obliga a abordar diversos desafíos éticos, de seguridad y de equidad, con la intención de asegurar que los avances tecnológicos implementados se traduzcan en beneficios tangibles para los pacientes y profesionales de la salud.
Esta necesidad, de la que las instituciones médicas son muy conscientes, será un factor de distinción y de calidad en la atención de los pacientes. Las nuevas herramientas favorecen una mejor asistencia sanitaria lo que está redundando en una prolongación de nuestra esperanza de vida. Por eso, una digitalización responsable y valiente será el mejor tratamiento que deberán aplicar los profesionales de la salud a lo largo de los próximos años.
David Espinilla, KAM AAPP y Salud Digital en Grupo Oesía